La talla de mimbre

Hoy comenzare a explicar el ultimo post que lo deje inacabado, como ya había dicho anteriormente después de haber cortado la mimbre cuando ya ha alcanzado una buena altura, hay que tallarla ese el paso que voy a explicar en qué consiste y como se realiza.
La talla del mimbre consiste en medir y clasificar este producto siguiendo un baremo común a todos los artesanos, la mayoría de los artesanos utilizaban un bidón donde metían el mimbre y después, con una tabla de madera que tenían vertical al lado del bidón median los puñados de mimbre (ya que se meten en el bidón por puñados) y después sacudiendo dicho montón se quedan con el mimbre que se está tallando en cada momento, esto se repite hasta que ya no quede más mimbre. Aquí hare un inciso y aprovechare para contaros que trabajar productos artesanales es un proceso muy repetitivo, sobre todo el proceso anterior a la obtención del producto final.
Ahora empezare a decir en que consiste la cocción de la mimbre para que se consiga ese color tostado del que ya os hable en la otra entrada publicada, la cocción consiste en meter la mimbre en una gran caldera que posee la parte en la que se atiza y encima de esta misma hay como una especie de piscina o pila de grandes dimensiones donde se mete la mimbre y después se rellena con agua, se atiza la caldera para que coja temperatura y empiece a cocer el agua estando pendiente de que el fuego no se apague para que siga cociendo se tiene que dejar unas seis horas, después de eso se deja que la leña que hay en la caldera se consuma. El mimbre se deja toda la noche dentro, para que a la mañana siguiente se pueda manipular sin riesgos de sufrir quemaduras.
Y hasta aquí la entrada de hoy, en la siguiente entrada publicare la manera en la que se pela este producto. He de decir que este tipo de piezas artesanas son de trabajo muy sacrificado, pero siempre te llevas la satisfacción de ver el remate final después de toda la elaboración.